Por María Carmen De Cucco Alconada[1]. Publicado en Academia, Revista sobre la enseñanza del Derecho. Año 14, número 28, 2016, pp. 127-144, Buenos Aires, Argentina, ISSN 1667-4154.
Resumen
Como las dificultades en la comunicación crean desconfianza, la complejidad del lenguaje jurídico constituye un problema que afecta a todos los niveles de una sociedad y reconocen los mismos abogados. Por esta razón y porque una justicia moderna es aquella que la ciudadanía es capaz de comprender, varios países han desarrollado programas de modernización del lenguaje jurídico. Así, el Movimiento del Estilo Llano, propone que todas las regulaciones se redacten de forma comprensible para quienes las tengan que cumplir.
En este trabajo postulamos que es preciso abordar un trabajo sistemático sobre escritura mediante la inclusión de una asignatura en los planes de estudios de la carrera de Abogacía que brinde a los alumnos herramientas para la redacción e interpretación de textos jurídicos con principal apoyo en su función comunicativa. La formación deberá continuarse con cursos diseñados a partir de la identificación de las reglas más “rentables” para la escritura de textos jurídicos de manera de atender más eficazmente a las necesidades de los profesionales en ejercicio, de jueces y funcionarios del Poder Judicial.
Sumario: I. Introducción. Ii. Diagnóstico. III. Aprendizaje y progreso en las prácticas de escrtura. A. Lectura. B. Práctica de la escritura. C. Corrección. D. Gramática y ortografía. IV. Identificación de las reglas más “rentables” para la escritura de textos jurídicos. V. Conclusión. Bibliografía.